En mis inicios musicales tuve dos senseis y una hechicera (asi se autonombraba ella - Karla era su nombre - ), con gustos muy diferentes entre si, pero con un comun denominador, el metal.
Aun cuando me encanta el metal y respeto a sus musicos como a pocos generos, ultimamente me he mantenido bastante lejos del genero, al cual, como hijo prodigo he de volver.
En el album que nos ocupa el dia de hoy, es de una banda originaria de Estocolmo, Suecia, parte de la region llamada Escandinavia, de donde es la mera mata del metal.
Una banda que toma su nombre de una historia (verdad o mentira, no deja de ser una simple - aunque muy adhoc - historia), en la que, unos pelados que amaban tocar buena musica fueron acusados de ser fieles servidores de Satan, y por lo tanto, perseguidos y aniquilados, no sin antes armarse un tokin magno de despedida, en el que fueron apresados.
En este disco se encuentra presente obvio el metal, con una fuerte dosis de swing, un buen toke de jazz, mucha trompeta y todo eso muy bien armado por una Big Band; pero sobre todo una soprano que canta de huevos, y una lirica satira y muy bien estructurada, pero lo que mas me gusto, fue que despues de escucharlo como 5 veces, no me fastidio, como solia pasar con el Metal.
Disfruten, y mucho metal para todos.
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